El lóbulo auricular y el uso de pendientes juegan un importante rol estético tanto para mujeres como para hombres.

Con el término “orejas o lóbulos rasgados”, nos referimos al ensanchamiento y alargamiento del agujero del lóbulo de la oreja como consecuencia del peso de los pendientes y el paso del tiempo. Además, puede producir incidentes como la pérdida de joyas. En ocasiones puede haber una ruptura total, causando una división del lóbulo llamada “lóbulo bífido”.

Otra situación cada vez más frecuente entre la población joven es el uso de piercing para dilatar progresivamente el lóbulo auricular (Plugs o Tunnels). Estos dilatadores terminan deformando la anatomía natural del lóbulo y algunas personas desean volver a la situación original.

Todas éstas situaciones se pueden resolver mediante un procedimiento rápido e indoloro en nuestra consulta y con una reincorporación inmediata del paciente.

La recuperación es muy rápida y los puntos se retiran a los 5 días.

Tras el tratamiento aconsejamos un periodo de al menos 30-45 días hasta volver a realizar un nuevo agujero en el lóbulo reparado.

También realizamos una pequeña hidratación de los lóbulos con ácido hialurónico para obtener un aspecto de mayor tersura y jugosidad de los lóbulos rejuvenecidos.